LOS DIÁLOGOS
Del 26 al 31 de octubre en Tijuana (México) se han celebrado las III Jornadas de Teatro THT Infancias y Juventudes. La compañía teatral liderada por Ramón Verdugo y Jesús Quintero, nos convocó en el Centro Cultural Tijuana (CECUT) a un grupo de agentes artísticos para pensar el teatro para infancias y juventudes desde distintos prismas: cultural, filosófico, editorial, artístico o educativo. El hecho de que se produjera en las mismas fechas el Segundo Encuentro de la Red Iberoamericana de Artes Escénicas para la Infancia y la Juventud ASSITEJ, facilitó que agentes provenientes de diversas latitudes como Paraguay, Argentina, Chile, México o España tuviéramos la posbilidad de pensar el futuro en términos de políticas culturales, de producción, de creación y de sostenibilidad.
El encuentro se inauguró con las ponencias de Gonzalo Moreno y Marta Torres, de ASSITEJ-España, que giraron alrededor de Agentes, territorios y público: un encuentro necesario. Aquí ya se pusieron de relieve algunos aspectos que habrían de seguir indagándose en los siguientes diálogos: el arte político, el territorio como identidad fronteriza y plural y la necesidad de una política cultural integral para el desarrollo de un trabajo enfocado en infancias y juventudes. Fue, sin duda, una intervención que repasando el trabajo hecho se instalaba en el futuro propiciando así una reflexión profunda.
Tanto así que la conferencia impartida por Virgínia Seguí y Débora Marquès Cultura sostenible y artes escénicas: ¿un diálogo posible?, indagó en la posibilidad de un trabajo escénico que entendiera los sostenible en su forma más integral y humana y que, a nuestro juicio, comparte gran parte del legado filosófico y político de la teoría feminista, poniendo los cuidados en el centro. Impartieron, además, el taller La ruta del artista sostenible: un modelo para pensar desde la creación y la producción escénica que tuvo gran acogida y éxito y donde se tejieron puentes para seguir trabajando en el futuro.
El domingo 29 de octubre sucedieron dos mesas de interés relevante. La primera mesa Presentación de libros: Editorial ASSITEJ- España, Editorial de la Casa y La edad de la punzada: Dramaturgia para adolescentes (Paso de Gato). La mesa invitó a Gonzalo Moreno, editor que, además de presentar las novedades de la editorial, habló de la importancia de compartir la experiencia editora con el ámbito artístico y educativo. De esa colaboración surge el Ciclo ASSITEJ de Lecturas Dramatizadas que permite compartir la experiencia literaria y escénica con un nutrido grupo de alumnas y alumnos provenientes de diferentes centros escolares. Por su parte, los editores y traductores de la mexicana Editorial de la Casa, Nadxeli Yrízar y Humberto Pérez, expusieron su doble trabajo, impregnado de rigor y cuidado, como traductores —pues acercan piezas del francés, inglés y sueco al mercado editorial mexicano— y como editores de obras cuidadosamente seleccionadas. Finalmente, Ramón Verdugo nos acercó una de las últimas novedades de la editorial mexicana Paso de Gato que en colaboración con el Festival Interpretas THT, Jornadas de Teatro Infancias y Juventudes, Centro Cultural Tijuana y la Universidad Nacional Autónoma de México, publicaron La edad de la punzada: dramaturgia para adolescentes (2023) y que recoge títulos de Amaranta Leyva, Antonio Zúñiga, Hasan Díaz, Jaime Chabaud, Jimena Eme Vázquez, Luis Eduardo Yee, Saúl Enríquez, Valentina Sierra y Xavier Villanova, bajo la presentación de Alegría Martínez quien recoge con estas palabras lo que el volumen ofrece:
El exilio político y la desaparición forzada; la persecución del crimen organizado, la construcción de un edificio en paralelo con la de una vida, el amor y la barrera del miedo; una leyenda propiciatoria del viaje rumbo a la conciencia y los opuestos entre el eco poético de Sor Juana; drogas, ilícitos, amor, soledad, rechazo, incomprensión y necesidad de un amoroso trabajo entre adultos y jóvenes para salvar vidas; la discriminación, el rechazo a lo diferente y la necesidad de transformar una falsa e ignorante actitud que impone la estandarización alejada de lo humano; un grito exigente envuelto en juego y sarcasmo, rumbo al cambio de una sociedad que ha errado en su afán de progreso; soluciones, solidaridad y unión entre mujeres, contra estereotipos de belleza, barreras sociales, machismo y abuso sexual; reducción de espacios públicos para el juego ante la indiferencia de los padres, madres, tutores y autoridades al derecho del desarrollo físico, mental, de convivencia y libertad de las y los jóvenes; suicidio y confusión entre fantasía y realidad, conforman parte del universo dramatúrgico de este volumen
(Alegría, 2023: 10-11).
A otro universo, de verdadera belleza, nos acercó Eulàlia Ribera —Presidenta de ASSITEJ-España— pionera y referente en nuestro país de las artes para la primera infancia en una conferencia que llevaba por título El camino de las Artes para la primera infancia: explorando los retos y experiencias. Su extenso trabajo quedó recogido en dos proyectos singulares: la Sala, centro de creación de artes para las familias de Sabadell (Barcelona), de la que Eulàlia Ribera es su directora y el Petit, festival internacional de artes para la primera infancia que en su última convocatoria 2023 llevaba por lema: Donde la imaginación emprende el vuelo. En efecto, Eulàlia Ribera —quien también dirige dicho festival— puso, durante su conferencia, el foco en una visión integral de las artes vivas —que abarca la investigación, la educación, el diálogo, la salud o la acción social— haciendo hincapié en la defensa de vivir experiencias artísticas en los primeros años de vida.
LAS PRESENTACIONES ARTÍSTICAS
A la vez que se desarrollaban talleres —de los que no podemos dejar una crónica puesto que no pudimos asistir— y diálogos en las distintas mesas, por las tardes tuvimos la oportunidad de asistir a diferentes representaciones provenientes de Baja California y España. Inauguró el ciclo la compañía Flores Teatro Danza con su espectáculo Ni tan chico ni tan lejos, donde los actores-bailarines en una propuesta poética de gran belleza mostraban el encuentro entre dos personajes que reconociéndose juegan guiados por la complicidad, el asombro y la curiosidad. La experiencia terminó con la invitación a las niñas y niños asistentes a pintar y jugar con el espacio escénico creado.
Por su parteTeatro en Resistencia con su espectáculo Imaginarios nos condujo a un teatro que pone en valor el poder de los sueños y la belleza de lo invisible, un espectáculo donde la palabra como protagonista relata la aventura de dos amigos imaginarios.
Tuvo lugar, asimismo, la lectura dramatizada de Hombre lunar, una pieza escrita por Denizza Flores que versa sobre un pequeño tripulante que, encontrándose a la deriva de una nave controlada por un sistema de navegación y que se niega a volver a la Tierra, relata cómo conoció a Hombre Lunar. Esta obra fue publicada recientemente por el Instituto de Cultura de Baja California en su colección Infantil / Juvenil en una hermosa edición de 2023.
Las compañías riojanas (España) Peloponeso Teatro y Mon Teatro trajeron Los cuervos no se peinan de Maribel Carrasco en un espectáculo repleto de imágenes evocadoras que cuenta el encuentro entre la mujer del sombrero rojo y un huevo. De ahí nacerá un cuervito, Emilio, que querrá como todos los niños ir a la escuela. Allí se tendrá que enfrentar a su singularidad y entender sus diferencias. Un tierno espectáculo que se estrenó en FETEN 2018 y que ha hecho gira extensa por diferentes festivales de reconocido prestigio.
Ocotillo, pieza pensada para las primeras infancias de la compañía Lunia Teatro (Chihuahua), toma su nombre de la flor del desierto homónima y, en efecto, en el escenario las actrices son dos flores que juegan mientras el viento acecha. Una propuesta sencilla que convocó a los más pequeños al término de la función a participar.
Finalmente, cerró las representaciones y las III Jornadas de Teatro THT Infancias y Juventudes, la compañía artífice de dichos encuentros Tijuana Hace Teatro que representó Mi sueño de invierno (Premio ASSITEJ-España, 2022) en Teatro de las Tablas —el resto de las funciones tuvieron lugar en el CECUT—. El espacio teatral de la compañía invoca a un lugar íntimo, de antigua corrala que, sin duda, los lleva a explorar lo más pequeño de la gesta escénica. En el caso de Mi sueño de invierno la pieza se vio envuelta en una atmósfera emocionante y valiente con un desempeño interpretativo muy admirables por parte de todos los integrantes del equipo artístico. Con música en directo y un movimiento medido hasta el extremo la obra fue unánimemente del gusto del público. Una muestra más de que hay otro teatro para infancias y juventudes que conjuga lo poético y lo político.
LAS ESCRITURAS
Finalmente, quisiéramos mencionar dos eventos que tuvieron lugar en el marco de las jornadas y que se centraron en la escritura y la dramaturgia. En primer lugar, la mesa que convocó a María Inés Falconi, Maribel Carrasco y quien esto escribe para pensar sobre Inquietudes y latitudes: Dramaturgias para dialogar con públicos jóvenes. Allí, conducidas por Ramón Verdugo, se sostuvo un diálogo apasionante sobre la palabra como espacio de resistencia, la necesidad de escribir estando al lado de la infancia y la búsqueda de un lenguaje propio. Por último, se puso de relieve la escritura para infancias y juventudes como acto político.
A esta doble concepción poética y política pudimos ofrecer una conferencia en la Facultad de Artes de la Universidad Autónoma Baja California que llevaba por título Lo poético y lo político en la escritura dramática para la infancia y la juventud: una mirada desde la filosofía de María Zambrano como parte del programa académico de la XX Semana de Aniversario de la Facultad de Artes. Haciendo un repaso breve por el nacimiento de la literatura infantil en Europa quisimos recalar en la importancia de los contextos políticos para el desarrollo de una práctica ética en la contemporaneidad. Siguiendo la estela de la razón poética de María Zambrano —quien a su vez reflexionó hondamente sobre la infancia como etapa diferenciadora de la vida— se finalizó con una suerte de decálogo para la escritura destinada a infantes y jóvenes entendida como un derecho fundamental que debía aunar lo político, lo poético y lo ético:
- No reproducimos la realidad, la tomamos como punto de partida para, sobre ella, crear nuestro objeto imaginario.
- Escribimos para que nadie pueda decirse ante el mundo inocente.
- Escribimos para que un niño o una niña tengan siempre un lugar al que volver.
- Escribimos para no olvidar nada: ni el silbido de las balas, ni la muerte, ni los éxodos, ni la orfandad. Escribimos por la memoria y para la memoria.
- Escribimos para que otro imagine lo que los ojos desmienten: ensanchamos lo real y lo hacemos posible.
- No diremos la infancia es o la juventud es como verdad categórica, asumiremos que no sabemos todo de infancias y juventudes, así, en plural, como estas jornadas, como el ancho mundo.
- Nunca renunciaremos a la esperanza en nuestras ficciones, no sería ético.
- Prohibido adoctrinar: no necesitamos partidarios ni acólitos, solo lectores y lectoras.
- No subestimamos la capacidad de infantes y jóvenes, conocen la sustancia poética de lo inefable. Por tanto, no tenemos derecho a la literalidad.
- Si no tenemos los nueve puntos anteriores presentes, ¿para qué escribir?, ¿por qué hacerlo?